El Movimiento de Izquierda Revolucionaria expresa su total solidaridad con el pueblo palestino, además reconocemos su inalienable e histórico derecho a recuperar la totalidad de su territorio, así como el legítimo derecho de los más 700 mil palestinos expulsados de sus tierras por la ocupación israelí a retornar a su hogar ancestral.
Es por ello que desde México y bajo el principio de reconocer el derecho de los pueblos a su libre autodeterminación, respaldamos la Gran Marcha del Retorno iniciada el pasado 30 de marzo en la Franja de Gaza y condenamos enérgicamente los actos genocidas del gobierno fascista de Israel, encabezado por el primer ministro Benjamín Netanyahu.
Desde la ocupación ilegitima de su país en 1948, el pueblo palestino sufre uno de los mayores genocidios de la historia, ante tal situación, el silencio de la opinión internacional resulta oprobioso. Por lo que es urgente que las organizaciones de derechos humanos, progresistas, de izquierda, comunistas y socialistas, nos pronunciemos por para exigir al gobierno mexicano expulse al embajador israelí y rompa toda relación diplomática con el régimen genocida.
El asesinato impune de por lo menos 17 palestinos y los cientos de heridos a manos de los francotiradores sionistas, representa un crimen para la humanidad, y por ello que los pueblos del mundo tenemos una deuda con el pueblo palestino.
El heroísmo del pueblo palestino que con sus puños enfrentan a los soldados sionistas, que con ondas desafían las armas de fuego, o que con piedras rechazan la presencia de los tanques; demuestra que al pueblo no les importa contra que o quien tengan que luchar, no les atemoriza que los sionistas/fascistas o E.E.U.U desaten el infierno en Gaza, Cisjordania y los territorios Ilegítimamente ocupados, Palestina siempre resiste y resistirá. La dignidad del pueblo palestino se encarna en cada de los hombres y mujeres que lucha por su tierra, Hoy es Yasser Mortaya y Ahed Tamimi, ayer Faris Odeh o Ibrahim Abu Thurayeh, pero siempre es la gran valentía de una nación que se niega a ser despojado y exterminado. Sim importar las armas del sionismo, los palestinos se niegan al destierro y genocidio. La lección que nos dan al pueblo del mudo es clara y simple:
¡PALESTINA VENCERÁ!
¡VIVA PALESTINA LIBRE!